Trenes de Roman a Bucarest

El tren de Roman a Bucarest es una buena alternativa con respecto al autobús o al avión. Viajar en tren de Roman a Bucarest es fácil, seguro y conveniente. Hay un tren directo que conecta estos dos lugares, y esto hará que tu viaje sea tranquilo y sin complicaciones. Los billetes se pueden reservar online y es buena idea comprarlos con antelación para asegurar tu asiento. Para aprovechar al máximo tu viaje en tren, revisa los horarios y elige la salida que más te convenga. En general, siempre hay diferentes tipos de trenes y clases de viaje para todos los gustos y presupuestos.

La distancia de Roman a Bucarest es de 245 km. Las vías ferroviarias unen estos dos lugares de forma directa, de manera que puedes trasladarte sin hacer conexiones. Si hay conexiones, las verás indicadas en tu billete.

La duración de tu viaje en tren de Roman a Bucarest varía dependiendo del tipo de tren. El tren más lento toma aproximadamente 5h 28m para llegar a Bucarest, y con el más rápido te tomará alrededor de 4h 54m. Te recomendamos optar por el servicio más rápido para ahorrar tiempo, sobre todo si viajas de día. Por otro lado, en el caso del servicio nocturno, un par de horas de diferencia en el tiempo de viaje no son tan importantes y la opción puede resultar hasta conveniente.

Normalmente los trenes son puntuales cuando salen de su estación de origen, pero a veces llegan más tarde de lo previsto a la estación final. Si vas a seguir viajando después de llegar a Bucarest, es bueno planificar una conexión que no sea de muy corta duración.

En muchos de los lugares, las estaciones de tren son céntricas y están bien conectadas con el transporte público de la ciudad, las estaciones de autobuses y los aeropuertos. Se trata principalmente de las estaciones más antiguas y consolidadas. Las estaciones más grandes y nuevas suelen estar en las afueras de los pueblos y de las ciudades, debido a que en estos centros hay limitaciones de espacio. Llegar o salir de este tipo de estaciones puede resultar complicado incluso en taxi, ya que a veces se aplican restricciones a los operadores de taxis autorizados a prestar este servicio a los viajeros. Por lo tanto, recomendamos verificar la ubicación de la estación de partida o de llegada, ya que en algunas localidades hay varias estaciones de tren.

Puede que haya vagones de distintas clases en un mismo tren y para un mismo trayecto. El precio del billete depende de la clase del vagón y varía desde el precio más barato para los asientos duros hasta el precio más caro para literas de gran confort en los trenes de lujo. Para la ruta Roman – Bucarest, el billete más barato cuesta , pero si quieres viajar con la mayor comodidad, el precio será de para el tren más costoso.

• Los billetes de tren suelen agotarse mucho antes del día de la salida. Reserva con antelación aun cuando tu viaje no sea en temporada alta. Si viajas en temporada alta, días festivos, puentes o fines de semana largos, es imprescindible reservar con antelación si no quieres cambiar tus planes a última hora. No necesitas ir a la estación para reservar, compra tu billete online con unos pocos clics.
• Si reservas con antelación podrás obtener los asientos y las literas que quieras. Por ejemplo, las literas inferiores son siempre las primeras en agotarse, mientras que las literas superiores pueden estar disponibles incluso en la fecha de salida. Del mismo modo, para distancias más largas, son los viajes nocturnos los que tienen mayor demanda, mientras que es posible reservar un billete para la misma ruta una hora antes de la salida si se trata de un viaje diurno poco conveniente que tomará la mayor parte de tu tiempo.
• En un mismo tren pueden haber diferentes categorías de vagones, por ejemplo, vagones con ventilador o vagones con aire acondicionado, vagones con asientos duros o con asientos blandos, literas de segunda clase o compartimentos privados. Antes de comprar tu billete, asegúrate de entender qué tipo de asiento estás reservando. Los precios pueden diferir mucho, pero a veces conviene pagar más y no tener que pasar 20 horas en un asiento duro, dentro de un vagón que tiene sólo ventiladores. En general, las literas de segunda clase son una buena opción para los viajes nocturnos más largos, mientras que para los viajes diurnos más cortos (de 4 a 6 horas), un asiento blando es una excelente opción.
• A veces el aire acondicionado de los trenes es demasiado fuerte, y también la calefacción durante la estación fría. Asegúrate de empacar ropa adecuada para no pasar frío o calor durante tu viaje. En los países cálidos, los vagones que tienen sólo ventilador son una alternativa aceptable y más barata que los vagones con aire acondicionado.
• Los trenes tienen baños a bordo. Dependiendo del tipo de tren, algunos vagones tienen baños equipados con inodoros en cuclillas o baños occidentales normales. Independientemente del precio de tu billete, los baños del tren lamentablemente no suelen estar muy limpios. Esto sucede sobre todo en los vagones de clase más barata, pero las quejas no son pocas incluso con respecto a los vagones de primera.
• Normalmente hay un vagón comedor en los trenes de larga distancia, pero para algunas rutas, los vagones comedor se han eliminado debido a las restricciones relacionadas con el covid-19. Revisa con antelación si hay comida a bordo o simplemente llévate algo de comer para estar seguro. En muchos trenes hay vendedores ambulantes que recorren los pasillos durante el viaje vendiendo refrescos y aperitivos. Las bebidas alcohólicas están prohibidas en los trenes.
• También está prohibido fumar, claro, a menos que estés viajando en la clase económica de un tren en algún lugar de China o Indonesia.
• Se recomienda llegar a la estación de tren al menos media hora antes de la salida para disponer de tiempo suficiente para encontrar el andén y hacer el check-in. Normalmente se necesita un pasaporte o el documento de identidad que se haya utilizado para comprar el billete de tren, así que tenlo a mano para presentarlo cuando te lo pidan en el check-in o en el embarque.
• Puede que los trenes lleguen a su destino más tarde de lo previsto. Este tipo de retrasos no es raro, sobre todo en los trayectos de larga distancia. Prepárate y planifica tomando en cuenta estos posibles retrasos. Sin embargo, en comparación con los autobuses, los trenes dependen menos de las condiciones meteorológicas y del tráfico, por lo que sus horarios son más fiables.